Conversaciones en la cama ¿Si o no?

Lo cierto  es que nunca sabemos cuándo es el momento de entablar conversación con un completo desconocido una vez acabamos de darle al tema. Claro, el objetivo era muy sencillo en el momento de comenzar, pero ¿y ahora? ¿Te has quedado bloqueada?

 

Bueno, más bien los dos. Una vez os habéis satisfecho mutuamente, una duda os asalta. Es la de ¿cuándo comenzar a hablar? Y, ¿qué decir? No nos resulta violento y/o incómodo cuando se trata de nuestro chico. Pero cuando se trata de alguien a quien acabamos de conocer, la cosa cambia.

Y es ahora cuando entiendes que la confianza es clave en la cama. Por ello, cuando el sexo es desenfrenado, tratándose de un rollito de verano, las posibilidades en la cama son mucho más limitadas.

Así lo asegura el doctor Martin Klein, terapeuta de pareja y escritor. Ha publicadoInteligente sexo, libro en el que nos da las mejores pistas para saber cómo actuar en cada momento del proceso sexual.

No es sencillo estar a la altura. Sobre todo porque no sabemos qué significa estar a la altura. Pero con sus indicaciones, podemos hacernos una idea de cómo tratar a la otra persona en ese instante determinado.  El objetivo es perder el miedo y alejarse de la desconfianza.

De esta forma, el doctor nos dice que es importante mostrarse atenta y ser amable. Los cariños siempre acercan a las personas que se los dedican, así que si le conoces de muy poco, es hora de tomarse alguna que otra confianza. Otra de sus claves es que siempre hablemos en positivo, y nunca en negativo. Es mejor hablar de lo que queremos y no de lo que no queremos.

De esta forma, le parecerás una persona mucho más vivaz, positiva y alegre. Las conversaciones serias no son nada indicadas para el momento sexual, o el post sexual. Es mucho mejor dejarlo para fuera del dormitorio.

Tampoco se nos recomienda hablar de nuestro pasado. Ni de con quién estuviste, ni de qué era de ti años atrás. Por supuesto, si te ha gustado algo de lo que te ha hecho durante el sexo, agradéceselo y dile lo mucho que te ha gustado.

Y aunque es mucho mejor hacer y no hablar después, por ejemplo, con un masaje para manteneros relajados, siempre podrás iniciar conversación con lo crack que es en la cama. Es la mejor forma para airear tensiones.